domingo, 26 de diciembre de 2010

El sentido que buscas


Hoy quiero compartir con vosotros un hermoso texto que he encontrado gracias a mi amiga María, de Facebook. Espero que os guste. Feliz Navidad.


El sentido que buscas llega sólo hasta ti
al transformar una herida,
al construir un puente con las piedras de un muro,
al recoger una angustia y convertirla en palabra,
al encontrar vivos en otros tus días perdidos,
al mirar la pobreza y contemplar la profecía.
Hoy puedo estar contigo.
He deseado para ti todo el bien y me acompaña la bondad del amor.
A ti te debo gozar en soledad la compañía más difícil del hombre,
la que tiene consigo mismo.
No me causa miedo reconocerme, ni busco a nadie, no.
Le has dado a mi semblante sin saberlo una luz interior que me hace fuerte,
para vencer mayores soledades.

jueves, 18 de noviembre de 2010

T. Q. M. (Sólo una ilusión)


Por un instante lo creí,
por un momento en que se abrieron
las cortinas y pudo entrar
la luz más pura y renovada.
Como nadie la había visto,
como primera luz de todas,
a propósito para el alma
con la fortuna concedida
de vislumbrar el infinito.
Después, abajo la mirada,
para seguir leyendo olvidos,
la soledad de un tiempo oscuro
que parece que ha nacido
en el silencio de los dioses.

lunes, 4 de octubre de 2010

La poesía en el alma

Echando un vistazo al periódico esta mañana, me entero de la muerte, a los 47 años, del poeta mallorquín Miguel Ángel Velasco. Finalista del Premio Adonais en 1979 con sólo 16 años, por su libro “Sobre el silencio y otros llantos”, dos años después lo conseguiría con “Las berlinas del sueño”, uno de los poemarios más hermosos de la Transición, una edición antes de que llegara otro de los títulos fundacionales de aquellos días, “El jardín extranjero”, del granadino Luis García Montero, y un año después de que lo lograra Blanca Andreu con “De una niña de provincias que se vino a vivir en un chagall”.

Poeta de una fuerza descomunal, la poesía era para él un sacerdocio más que un oficio, algo que llevaba cosido al alma. Viajero incansable del universo poético, buscó siempre nuevos territorios para su poesía, reinventándose y cambiando de registro sin por ello dejar de ser fiel a sí mismo. Su pasión por las vanguardias y un culturalismo que manaba de forma natural dejaron paso a un poeta maestro en el alejandrino, el endecasílabo, el verso blanco, en la escuela sobre todo de Agustín García Calvo.

Hace siete años obtuvo el Premio Loewe de poesía con “La miel salvaje”. En la portada de este libro aparece una imagen de un insecto atrapado en ámbar del Báltico, como reliquia de un tiempo perdido para siempre. Y de este mismo libro reproduzco el siguiente poema que espero que os guste:


SORTIJA

Se abisma el ojo en la encendida gota
procelosa del ámbar.
Hay un fragor secreto en la provincia
resumida. Un mosquito, oscuro Ícaro
del tiempo soterrado,
bogando en la burbuja que aún conserva
ese violín sin norte del zumbido.

Relicario de brasa. Dura lágrima
de un sol cristalizado en agonía
de remotas partículas que fuimos
en la aurora volcánica.
Ascua de nuestro infierno,
que transportamos como quien no sabe
que atesora su ruina, la Pompeya
del Día de la Ira en un anillo.

sábado, 18 de septiembre de 2010

De repente la lluvia


De repente la lluvia, que se lleva
el color y el verano,
y la pena en tu puerta
y un beso que acechaba en la penumbra.
Desprevenida el alma
en esta lluvia de septiembre,
con su verso vagando
por lágrimas sin nombre,
con su tiempo aún dispuesto
en el rumbo de unos ojos.
Al raso aún los sueños
con su anhelo de mariposa,
y ya la lluvia y su dolor opaco,
con la esperanza adelgazando
en la luz que se aleja, que se aleja...

domingo, 5 de septiembre de 2010

Un viaje en tren


10 de septiembre de 1946. Una religiosa menuda y fervorosa se dirige en tren hacia Darjeeling, un pueblo enclavado a los pies del Himalaya, para hacer su retiro anual. Es un lugar idóneo para tomarse unos días de descanso y oración, justo al borde de las nieves perpetuas, de escalofriantes alturas que parecen como talladas para transportar el espíritu a una altura superior, hacia la región de las moradas celestiales y eternas.

En su ánimo no figura otra intención que continuar siendo una devota hermana de Loreto y una puntual profesora en la escuela de St. Mary, rodeada del cariño de sus alumnas. No puede imaginar que allí mismo, en el tren, va a tener su primer encuentro con la “Voz”, como después se referiría a ella. Una “Voz” que la llamaba a abandonar la comodidad de Loreto, donde se encontraba tan feliz, para ir a la calle a servir a los más pobres de los pobres, para dejarlo todo e ir con Él a los barrios más miserables.

No, no podía ser ésta la respuesta a su oración, a su deseo de llevar alegría a quienes había sido enviada, a su petición de “fuerza para ser siempre la luz de sus vidas y así guiarlos hacia Ti.” Sin embargo, la “Voz” no ofrecía ninguna duda en cuanto a sus intenciones: “Ven, ven, llévame a los agujeros de los pobres. Ven, sé Mi luz.”

“No negarle nada”. Éste era el voto extraordinario que Madre Teresa había hecho cuatro años antes a Dios, una entrega sin reservas, para darle cualquier cosa que le pidiera. Pero ¿cómo podía ella satisfacerle? Debía dejar aquello que amaba y exponerse a trabajos duros y a sufrimientos que serían grandes. ¿Te negarás? Se enfrentaría sin duda a la incomprensión de muchos y quizás a las burlas de algunos. ¿No me ayudarías? La obra que Jesús le pedía la obligaba a un cambio radical en su existencia, a abrazar la pobreza como norma de vida y a beber de la miseria y el dolor de las calles de Calcuta. “Te has hecho Mi esposa por amor a Mí – has venido a la India por Mí. La sed que tenías de almas te trajo tan lejos. - ¿Tienes miedo a dar un nuevo paso por tu Esposo? Por Mí – por las almas? - ¿Se ha enfriado tu generosidad?

Durante los días siguientes, durante los meses siguientes, Madre Teresa continuaría escuchando esa voz que con ternura se dirigía a ella como “Esposa mía” o “Mi pequeñita”. A ella, una persona débil e incapaz, le tocaba enfrentarse a una labor de gigantes. Pero las respuestas seguían siendo cada vez más claras: “Quiero hermanas indias Misioneras de la Caridad – que serían Mi fuego de amor entre los más pobres – los enfermos – los moribundos – los niños pequeños de la calle. – Quiero que Me traigas a los pobres – y las hermanas que ofrecerían sus vidas como víctimas de Mi amor – me traerían estas almas a Mí. ¡Sé que eres la persona más incapaz, débil y pecadora, pero precisamente porque lo eres, te quiero usar para Mi Gloria! ¿Te negarás? "

Estas palabras, o más bien esa voz, la atemorizaban; el pensamiento de comer, dormir, vivir como los indios la llenaba de miedo. Rogó a la Virgen María que pidiese a Jesús que la apartara de todo eso. Pero, cuanto más rezaba, más claramente crecía la voz en su corazón, y así rezó para que Él hiciera con ella todo lo que quisiera. “Has dicho siempre ‘haz conmigo todo lo que desees’. – Ahora quiero actuar – déjame hacerlo – Mi pequeña esposa – Mi pequeñita. – No tengas miedo – estaré siempre contigo. – Sufrirás y ahora sufres – pero si eres Mi pequeña esposa – la esposa de Jesús Crucificado – tendrás que soportar estos tormentos en tu corazón. – Déjame actuar. – No Me rechaces. – Confía en Mí amorosamente - confía en Mí ciegamente”. “Pequeñita, dame almas – dame las almas de los pobres niñitos de la calle. – Cómo duele – si tú sólo supieras – ver a estos niños pobres manchados de pecado. Anhelo la pureza de su amor. – Si sólo respondieras a Mi llamada – y me trajeras estas almas – apartándolas de las manos del maligno. – Si sólo supieras cuántos pequeños caen en pecado cada día. Hay conventos con numerosas religiosas cuidando a los ricos y los que pueden valerse por sí mismos, pero para Mis muy pobres no hay absolutamente ninguna. Es a ellos a quien anhelo – les amo. - ¿Te negarás?”

No, Madre Teresa no se negó. A pesar de las dificultades. A pesar de su debilidad. En medio de la terrible noche oscura que sufriría durante buena parte del resto de su vida, consiguió llevar la luz de Cristo a miles de almas que vivían en tinieblas; ese Cristo agonizante que es cada pobre y cada persona que sufre pudo ver calmada su sed. Hoy la labor de la Madre Teresa se extiende por todos los rincones del planeta, aquella formidable y divina empresa que comenzó en un tren continúa llegando a los más desamparados. Madre Teresa es un claro ejemplo de cómo Dios se sirve de las personas más débiles y sencillas para llevar a cabo su obra; toda su fortaleza era Cristo. Sigamos su ejemplo. No tengamos miedo a escuchar esa Voz que en ocasiones nos invita a seguirla por los caminos más difíciles.

martes, 3 de agosto de 2010

De una noche de verano


El sueño, el único lugar posible, donde aún luces nuevos tu vestido de entonces y tu blanca sonrisa, donde aún es posible caminar por páginas no escritas. Un instante tan sólo tu mirada, lo suficiente para creerme estrella y ser bautizado con lo imposible. Esos metros de eternidad que son el cine, con esa luz que cautivará a otras miradas, a los ojos aprendices de la noche y su misterio. Gran dama del nuevo firmamento, ilusión de mi sala más íntima, sólo por un instante el objetivo de tus ojos, de ese intento de infinito que enseguida se desvanece.

A Lauren Bacall

martes, 20 de julio de 2010

Lavando conciencias


Anda uno estos días sumido en el sopor de la enfermedad, pero hay cosas que pronto te despiertan de dolores, fatigas, modorras y demás letargos del verano. Vagando un poco por páginas de Internet, me encuentro con una pequeña tarascada entre uno del PP y otro que le reprocha que, en ocho años de gobierno popular en España, se practicaron 500.000 abortos y nadie de este partido movió un dedo por cambiar la ley. Le contesta el pepero que una cosa es que el aborto esté penado, excepto en tres supuestos, y otra que el aborto sea un derecho.

Evidentemente, no es lo mismo, pero para el caso viene a serlo, porque en ambos supuestos –peor, claro, con la nueva ley del aborto- la pérdida de vidas humanas sigue siendo elevadísima. Curiosa forma tienen algunos de lavar su conciencia, como si ésta pudiera depender de lo que diga una ley. Es decir, que si la ley pena el aborto pero no lo castiga en algunos supuestos, ya me puedo ir a dormir tranquilamente a casa porque en el fondo la ley lo castiga y aquí no ha pasado nada, ya no existen víctimas inocentes ni vidas truncadas en lo más tierno de su desarrollo. No comprendo cómo se puede uno “conformar” con los más de cien mil abortos al año que se producían con la ley anterior.

Se equivocan los del PP si piensan que derogando la nueva ley –algo que todavía está por ver- van a terminar las protestas. Que hay que acabar con esta ley demencial es algo fuera de toda duda; pero que nadie piense que es para volver al “régimen” anterior. Si algo ha tenido de positivo el nuevo engendro parlamentario, ha sido el despertar de una sociedad que hasta hace poco parecía dormida en un tema tan sangrante como el que nos ocupa. Si algo han tenido de positivo las Bibianas, Trinis, De las Vegas y demás pesadillas infantiles, ha sido el de servir de aldabonazo a una conciencia que parecía aletargada entre luces de neón y escaparates. Las protestas van a continuar mientras continúe el derramamiento de sangre inocente, mientras al ser más indefenso, bajo el amparo de leyes inicuas, se le siga negando el derecho a la vida. Al menos desde este sitio.

jueves, 8 de julio de 2010

La víctima más débil


Sacrificios olmecas. Aunque no existe evidencia irrefutable de sacrificio de infantes en esta cultura, se han encontrado esqueletos completos de recién nacidos, así como fémures desmembrados y calaveras, en un sitio olmeca en el estado de Veracruz llamado el Manatí. Estos huesos han sido asociados con ofrendas sacrificiales, particularmente unos bustos de madera.

Sacrificios mayas. La extracción del corazón aparece en algunas ocasiones en el arte maya. Los sacrificados parecen niños. La extracción de corazones de niños se ve en la cerámica pintada. Otro caso conocido es la Estela 11 de Piedras Negras en Guatemala, en la que se ve la cavidad pectoral de un niño sacrificado.

Sacrificios toltecas. En 2007 los arqueólogos anunciaron que habían analizado los restos de dos docenas de niños, de cinco a quince años, encontrados enterrados con figurillas de Tláloc. Los niños, encontrados cerca de las viejas ruinas de Tula, la capital tolteca, habían sido decapitados.

Sacrificios totonacas. Los totonacas en ocasiones sacrificaban niños para extraerles la sangre, la cual era mezclada con semillas para hacer una pasta que se comía entre los adultos.

Sacrificios aztecas. En Xochimilco, al sur de la Ciudad de México, se encontraron los restos de un niño de tres a cuatro años cuyos huesos presentaban una coloración naranja o amarilla traslúcida; texturas tersas o vítreas, y compactación del tejido esponjoso, además de estrellamiento del cráneo.

Sacrificios incas. “Capacocha” era la práctica inca de sacrificio humano, generalmente usando niños. Los sacrificios se hacían en o después de eventos importantes, como la muerte del Inca o durante una hambruna. Se escogía a los niños para ofrecérselos al Inca para esta ocasión. Se cree que los niños usados tenían que ser físicamente perfectos: lo mejor que se le podía ofrecer a los dioses. Los niños eran adornados con ropa fina y joyería, para ser escoltados al Cuzco a fin de reunirse con el emperador, donde se realizaría un banquete en honor de los niños. Entonces, el sumo sacerdote llevaba a las víctimas a la cumbre de la alta montaña, donde los sacrificaba por estrangulación o mediante golpes en la cabeza. Los misioneros escribieron copiosamente sobre el ritual, pero hasta muy recientemente no se había hallado evidencia arqueológica.

Sacrificios siglos XX-XXI. El sacrificio de niños, en especial de los no nacidos, continúa siendo una práctica bastante habitual en nuestros días, sobre todo en la parte del planeta conocida como Occidente. Los dioses antiguos, como Tláloc, Tezcatlipoca, Chalchitlicue o Quetzalcóalt, han sido sustituidos por otros llamados Placer, Egoísmo, Ideología, Fanatismo o Ignorancia. En algunas partes, incluso, se está empezando a sustituir las viejas leyes que condenaban el crimen por otras que lo consideran un derecho, con el fin de enraizar su uso en una sociedad cada vez más dada a estas prácticas antiguas. El método más utilizado para los sacrificios es el llamado “dilatación y curetaje”, en el que se utiliza una cureta o cuchillo provisto de una cucharilla filosa en la punta, con la cual se va cortando al bebé en pedazos con el fin de facilitar su extracción por el cuello de la matriz.

martes, 29 de junio de 2010

¡Es España, imbéciles!


“¡Es la economía, imbécil!” Ésta fue la frase que le soltó Bill Clinton a George Bush padre en la campaña electoral que le llevó por primera vez a la Casa Blanca. Con ella daba a entender que, aunque Bush había tenido un notable éxito en política exterior, con el fin de la Guerra Fría y la I Guerra del Golfo, el verdadero problema estaba en la economía y en la recesión que sufría el país en esos momentos. Nadie ponía sobre la mesa, por supuesto, el modelo de estado y la unidad territorial, en un país donde no suele aparecer ningún botarate que cuestione la idea de nación, y menos si le toca ocupar la presidencia.

Daba pena ver ayer a nuestros políticos, tras la resolución del TC sobre el Estatuto catalán, presentar ésta como la que más se ajustaba a sus esperanzas, al modo de los resultados de unas elecciones, donde siempre parece que todos ganan y nadie pierde. A Zapatero y sus secuaces ya los conocemos: odian España, sus costumbres, sus tradiciones, todo lo que suene a español, y son capaces de pactar hasta con el mismísimo diablo o con el sultán de Marruecos con tal de seguir en el poder. De los otros –patética ayer Soraya-, en cambio, se esperaba algo más, una defensa de la idea de España –y una perseverancia en ella- con la que muchos nos hemos criado y hemos aprendido a amar a esta tierra. Qué espectáculo ayer el de nuestros políticos, he ganado yo, has perdido tú y, mientras, España desangrándose como la verdadera víctima de sus disputas. Dan ganas de gritarles lo de Clinton a Bush hace unos años, cambiando, como es lógico, los términos de la exclamación: “¡Es España, imbéciles!”

sábado, 26 de junio de 2010

El origen de "La Roja"


Creo que era al amigo Lucio al que le comentaba hace unos días que la primera vez que oí eso de “La Roja” fue en labios del anterior seleccionador, Luis Aragonés, por lo que pudiera éste ser su origen. Al parecer estaba en lo cierto. El pasado domingo leía en las páginas de “La Razón” digital unas declaraciones suyas, al poco de llegar al cargo, en las que decía que le gustaría “que la selección tuviera un nombre, una identidad. Igual que Brasil es la canarinha o Argentina la albiceleste, me gustaría que España fuera La Roja”.

No tiene, por tanto, este término connotaciones políticas. Igual que Uruguay es la celeste, Italia la azzurra, o Francia “les bleus", “La Roja” sólo alude al color de la camiseta, aunque el nombre haya calado sobre todo en los medios prisaicos. Pretendía Luis con esto conseguir una mayor identificación de la afición con el equipo de todos los españoles, y razones creo que no le faltaban. A mí me da envidia ver cómo en otros países el primer equipo de todos es la selección nacional. Aquí no. Aquí el primer equipo es el Madrid, el Barça o el Alcoyano, que ya hay que tener moral para esto último.

Hasta hace poco, a España se la conocía como “La Furia”, un apelativo que nació en los Juegos Olímpicos de Amberes de 1920 cuando, en un partido contra Suecia, Belauste, al grito de “A mí el pelotón, Sabino, que los arrollo”, pedía el balón con el que conseguiría el primer gol de una remontada que se había puesto muy difícil. Y en algunos lugares de Hispanoamérica se la conoce como “La Furia Roja”, una denominación que ayuda a distinguirla de la selección chilena, nuestro rival de ayer, que reclama para ella sola el sobrenombre de “La Roja”.

La verdad es que, viendo ahora la añada de nuestra selección, formada en buena parte por jugadores técnicos y no demasiado fuertes, no parece que nos cuadre mucho eso de “La Furia”, algo que sí definía bien a los Camacho, Maceda o Gordillo de otro tiempo, aunque esto es algo que va por épocas. En cualquier caso, seamos “La Roja”, “La Rojigualda”, “La Furia”, o como quiera que se nos llame, lo importante es que España sea el equipo de todos y reciba nuestro apoyo. Y que ganemos, a ser posible.

jueves, 24 de junio de 2010

El perturbado


Leo que “Un perturbado ataca el Jesús del Gran Poder de Sevilla y le arranca un brazo”, y no puedo evitar pensar en el inquilino de la Moncloa. Luego compruebo que no, que se trata de un funcionario de prisiones de la cárcel de Huelva, de 37 años, que al parecer tiene alteradas sus facultades mentales y se cree nada menos que Jesucristo.

Algo tendrá nuestro presidente para acordarme de él al leer la noticia. Hay un libro que se llama “El iluminado de la Moncloa”, de Pío Moa, y el otro día César Vidal comentaba que a veces le daba la impresión de que Zapatero no se encontraba muy bien de la cabeza, después de aconsejar al Primer Ministro británico que emprendiera cuanto antes las reformas económicas necesarias para salir de la crisis. Así que parece ser que no soy el único en asociar su nombre al de un perturbado. Pero no es, como decía antes, Zapatero el autor de esta agresión a la venerada imagen sevillana que, por fortuna, no ha sufrido daños de gran consideración y volverá a estar expuesta al culto en pocos días.

Me doy cuenta, sin embargo, de que Zapatero quizá no sea el autor del atentado al Jesús del Gran Poder, pero sí de otras acciones por las que muy bien podría ser tildado con el calificativo de perturbado. Porque desde luego hace falta ser perturbado para, bajo el amparo de una ley como la de Memoria Histórica, provocar de nuevo el enfrentamiento entre españoles reabriendo las heridas de la Guerra Civil. O hace falta ser también perturbado para intentar cambiar de la noche a la mañana las tradiciones religiosas de todo un pueblo, como lo sucedido en el Corpus de Toledo hace unas semanas o con la nueva Ley de Libertad Religiosa que se avecina. Por no hablar de que es prácticamente imposible que reconozca su inutilidad para sacarnos de la crisis y marcharse así de donde nunca debió haber llegado, o de esa ley demencial que pretende convertir en un derecho el asesinato de niños inocentes; no me extraña que luego se quejen del descenso de la natalidad.

El perturbado de Sevilla al menos se encuentra en observación psiquiátrica; en cambio, el perturbado que nos gobierna continúa en su sitio y prácticamente no hay día que no haga alguna de las suyas. Todo un país con el alma en vilo esperando a ver hacia dónde se dirige el próximo disparo, o en la esperanza de que al menos los Obamas o las Angelas Merkel de turno pongan un poco de remedio a su solemne incapacidad.

martes, 15 de junio de 2010

Días de junio


“Junio es amigo del sol”, dice una conocida cancioncilla sobre los meses del año. Sin embargo, este año me parece que el mes ha tomado de la diosa Juno tan sólo el nombre. No recuerdo un junio así; ni mi madre, que es mayor, tampoco. Diríase que hubieran cancelado el verano y nos encontráramos ya con los primeros fríos de septiembre, con ese cielo gris y esa lluvia con que se anuncia el otoño.

En el jardín, el gato gris del que hablaba en mi crónica de febrero se ha transformado en un gatazo oscuro, casi negro, con algún toque de amarillo. El gris sigue viniendo, pero parece haber cedido la corona del Beckham a este rival más poderoso, y más sociable, pues no sale como un rayo en cuanto atisba la más mínima presencia humana. Con el único que pone los pies en polvorosa, y aun así sólo cuando se acerca demasiado, es con el Rufo, el auténtico monarca de este sitio, que parece empeñado en llevar hasta sus últimas consecuencias eso de “como el perro y el gato.”

El Rufo. ¿Cuántos años tendrá ya? Ya sé que son catorce, pero ¿a cuántos equivalen de la vida de una persona? Sean los que sean, debe de ser bastante mayor. Y vaya si se nota. Llevo un tiempo que he notado que está un poco teniente, o bastante, que a veces tengo que despertarle con la mano para dar nuestro paseo diario. Quién lo iba a decir. El Rufo, sordo, sin uno de los sentidos que le hacen infinitamente superior al ser humano. Quizá tenga también sus ventajas y este año no salga despavorido cuando tiren los cohetes en las fiestas.

Hace un rato que ha cesado la lluvia escasa y que se han marchado esos negros nubarrones que amenazaban con un diluvio, y ahora luce un sol espléndido. La tarde se ha quedado inmóvil, calmada, y el verde nuevo de los árboles resalta ahora con toda su intensidad, consumada ya la primavera. Algo así debe de ser ese “silencio verde, todo hecho de guitarras destrenzadas”, del que hablaba Gerardo Diego. Otro silencio, además, más intenso que el anterior, se cuela por las ramas de los árboles y penetra hasta el alma. Es el silencio de quien amaba estos árboles y esta luz, y que se ha marchado para siempre. Es el silencio que aún duele y pregunta con la última palabra. Divina esta brisa que dice que algún día continuará la conversación interrumpida.

viernes, 21 de mayo de 2010

A los leones

Parece que no han bastado funcionarios, pensionistas y personas dependientes para saciar el hambre que la incompetencia de la casta gobernante ha provocado en los leones de la crisis, y ya han surgido voces sugiriéndole a Nerón el viejo truco, que vuelva a echar a la arena a los de siempre: los cristianos. Si hace unos días era Tomás Gómez, el secretario general de los socialistas madrileños, quien abogaba por que la Iglesia católica renunciara de manera voluntaria a parte de lo que recibe por la Declaración de la Renta para colaborar, según él, en la lucha contra la crisis, ahora ha sido el eximio pensador José Blanco quien ha especulado con la desaparición de la casilla de la Iglesia del IRPF. Sostiene el ilustre estadista que la Iglesia se lleva la mayor parte de las ayudas que el Gobierno concede a las instituciones, incluidos los partidos políticos, los sindicatos y las ayudas sociales. “Podemos suprimir la casilla de la Iglesia católica –ha manifestado- y sólo quedaba para gasto social, por tanto podía ser una idea, no la estoy proponiendo, pero lo digo porque a veces se juega demasiado con el populismo y la demagogia.” Pues mire usted quién fue a hablar de populismo y demagogia, don José. Frente a estas palabras, sólo cabe recordarle a esta gente lo más elemental, como ha hecho monseñor Braulio Rodríguez, arzobispo de Toledo: “El sistema que tenemos en la Conferencia Episcopal es de asignación voluntaria, no es ningún impuesto. La gestión es del Estado, pero son los fieles, o los que no lo son, quienes ponen esa crucecita; por lo tanto la aportación es libre.” Además, claro, de poner de manifiesto una vez más la ingente labor social y educativa que la Iglesia lleva a cabo, con instituciones como Cáritas, por la que mucha gente que no es creyente no duda en marcar también esta casilla, y sin la cual el Estado tendría poco menos que echar el cierre.


sábado, 15 de mayo de 2010

La pista de tenis


Cuando llegaba el verano, nos acercábamos a alguna de las eras del pueblo y trazábamos sobre ella una pista de tenis. En aquella época todavía se trillaba alguna vez la mies, y, aunque irregular en algunas zonas de su superficie, la tierra aplanada devolvía casi siempre el bote de la pelota. Quizá fuesen un poco rudimentarios nuestros métodos, pero solían resultar bastante efectivos. Una cuerda estirada sobre el suelo, a lo largo de ella un poco de yeso, y ya teníamos unas líneas que, en más de una ocasión desajustadas por alguno de sus ángulos, dibujaban una pista de tenis con sus medidas reglamentarias.

Algo más complicado resultaba fabricar la red, como tuvimos ocasión de comprobar. No nos sirvió la primera de todas, una que cosimos con unos sacos de abono de plástico y a la que tuvimos que decir adiós en cuanto se levantó la primera ventolera. Por fin, no recuerdo si porque lo vimos a otros muchachos o porque alguien nos lo sopló, dimos con el remedio adecuado: una vieja red de las olivas, de las que se usaban para recoger las aceitunas, resultó justo lo que necesitábamos para nuestros propósitos. Cortada y cosida como una franja horizontal, tensada por una cuerda que se introducía en un pliegue de su parte superior y que era atada a dos viejos barrotes de cortina, uno en cada extremo, y a otros que jalonaban sus once o doce metros de longitud, fijos a su vez en unos tubos de hierro incrustados en el suelo que habíamos conseguido que nos regalaran en la fragua, podía pasar por una red de verdad, de las que usan los tenistas profesionales.

Cada día, sobre las siete de la tarde, a veces antes, arramblábamos con raquetas, red y palos en las bicis y nos acercábamos a la era para montar nuestro pequeño Wimbledon particular en el que, a falta de juez de línea, era el ojo, o en su defecto una breve discusión, el que resolvía si la bola había entrado o no. Sospecho que nadie que nos viera jugar hubiese afirmado que éramos poseedores de una técnica depurada, pues sucedía a menudo que, tras uno de esos raquetazos en los que empleábamos más el corazón que la cabeza, perdíamos más tiempo yendo a por la pelota que en el desarrollo del juego, por no hablar de cuando quedaba aburrida en algún tejado próximo, circunstancia ésta que marcaba el fin del juego cuando no teníamos pelotas de repuesto.

Con todo, no puede decirse que lo pasáramos mal en los partidos. Oculto el rostro bajo unas gorras de visera que nos defendían del sol letal de julio y agosto, las horas transcurrían plácidamente sin más sobresaltos que si la pelota había botado dentro o fuera, con nuestros descansos para beber de un agua que acababa siempre como las babas y alguna mirada a un horizonte que se negaba a desaparecer de nuestra vista. La tarde se asemejaba entonces un fósforo cuya llama no se extinguiese y a un enorme árbol de una sombra tan intensa como el cariño de los padres, cuya compañía imaginábamos para siempre. Nada nos hacía sospechar de la existencia de esos lugares oscuros llamados tanatorios, y que el tiempo se apresurase un día en alcanzar un destino que nunca supusimos tan cercano.

martes, 4 de mayo de 2010

Sin nosotros en vuestro vuelo


Te crees que van a vivir siempre, pero no es así. Te crees que vas a gozar siempre de su presencia, que van a estar siempre ahí para sacarte las castañas del fuego, pero tarde o temprano te das cuenta de tu error. Y no es que en el fondo no lo supieras, pero te niegas a aceptarlo, te niegas a aceptar que esa persona que es vida para ti, que te ha transmitido la vida, tenga un día que desaparecer.

Y sin embargo, la idea de separación, de alejamiento de aquellos que nos dieron el ser físico, mucho antes de que se produzca la separación definitiva, ya está inscrita en nuestros genes desde el comienzo. Así nos lo dice la Biblia cuando afirma que “dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán una sola carne.” (Gén 2, 24; Mt 19, 5; Mc 10, 7). Y santa Teresa de Jesús, cuando pone en boca de los padres: “Os damos alas para volar y después os pedimos que os alejéis con ellas en vuestro vuelo, os damos vida para vivir y después os suplicamos que la viváis sin nuestra vida.” Una ley de vida que puede parecer cruel en un principio, pero que se acepta y se desea finalmente de buen grado para dejar su curso a la naturaleza: “Aún así, es nuestro gran anhelo veros sin nosotros en vuestro vuelo.”

Así está escrito desde que el mundo es mundo y así sucederá hasta el final de los tiempos: la carne sucederá a la carne para acompañar al sol en su peregrinaje por el universo. Hubo una vez un niño que cuando comprendió la ley de la separación definitiva, es decir, el tiempo, se puso a llorar desconsoladamente debajo de una mesa. En su ingenuidad, creyó a sus progenitores cuando le consolaban diciéndole que aún faltaba mucho para ese momento. Hoy, ese niño ha regresado, y vuelve a llorar sin consuelo porque se ha cumplido el plazo, el fin de un sueño bajo el sol. Sin embargo, su mirada dolorida no se detiene en ningún punto en concreto y se pierde lejos, mucho más lejos del horizonte, allí donde quizá el tiempo, al fin desarmado, no pueda con sus hojas configurar el olvido.

A mi padre,
en el recuerdo.

martes, 27 de abril de 2010

La más hermosa de las naciones


Celebramos ayer, 26 de abril, la festividad de San Isidoro de Sevilla, obispo y doctor de la Iglesia, patrón de la Facultad de Filosofía y Letras, además de Internet y de los internautas. En unos tiempos en los que se niega a España su existencia como nación, o se le otorga esta condición en una fecha bastante tardía, me gustaría traer hoy un texto suyo donde la conciencia de españolidad aparece de forma meridiana. Fue la época visigoda un período en el que, tras el hundimiento del imperio romano, los habitantes de la península comenzaron a considerarse miembros de una nación independiente, ya no vinculada a imperio alguno, y a la cual daban el viejo nombre romano: Hispania, España. He aquí lo que escribió el autor de las Etimologías:

¡Oh España! La más hermosa de todas las naciones que se extienden desde Occidente hasta la India. Tierra bendita y feliz, madre de muchos pueblos... de ti reciben la luz el Oriente y el Occidente. Tú, honra y prez de todo el orbe; tú, el país más ilustre del globo... No hay en el mundo región mejor situada. Ni te abrasa el estío ni te hiela el rigor del invierno sino que, circundada por un clima templado, te nutren céfiros blandos. Cuanto hay de fecundo en los ejidos, de precioso en las minas y de provechoso en los animales, tú lo produces... Rica, por lo tanto, en hijos, joyas y púrpuras, fecunda también en gobernantes y en hombres que poseen el don de mandar, te muestras tan fecunda en adornar príncipes como feliz en producirlos. Con razón, ya hace mucho tiempo, te deseó la dorada Roma, cabeza de gentes, y, aunque vencedor, aquel empuje romano te desposara primero, luego, el muy floreciente pueblo de los godos, tras haber conseguido numerosas victorias, a su vez te tomó y te amó...

jueves, 15 de abril de 2010

Cantan los pájaros


Telegrama divino
en hilos del silencio,
para el alma que espera
en serena sonrisa.
Terminó la disputa
y vuelve el río manso,
la quietud de las horas
en el pulso discreto.
Reinado de lo azul,
del perpetuo horizonte
que extiende en sus papeles
la dorada promesa.
Agoniza el sentido
mientras labra el espíritu,
en su leve aleteo,
una perla sagrada.

viernes, 2 de abril de 2010

El Cordero apaleado


Temblaba, pues, Jesús que por primera vez sentía la vergüenza de la desnudez. Su cuerpo era el de un hombre. Su miedo el de un hombre. Su soledad en medio de la jauría era la soledad del hombre. Silbó el cuero en el aire. Él había dicho: Amad a los que os odian. Sintió la quemadura del primer latigazo y su carne se contrajo dolorida. Había predicado: Haced bien a los que os maldicen. Un nuevo lictor hacía vibrar ya sus correas. Ofreced la mejilla izquierda a quien os abofetea en la derecha. Saltó la primera sangre y una correa mal dirigida cruzó por primera vez su cara. Bienaventurados los perseguidos por la justicia, pensó, mientras un nuevo golpe le obligaba a retorcerse. Era un hombre, eran las espaldas de un hombre. ¿El Padre le había abandonado? Apretó sus dientes, clavó sus uñas en la argolla de hierro que le sujetaba. Temed a los que puedan hacer daño a vuestra alma, no a quienes puedan herir vuestro cuerpo. Oía las risas y los jadeos de los que golpeaban. Su espalda era ya un campo arado, rajado como por cuchillos, y la sangre se mezclaba con largos surcos azules y morados. Era un dolor tan ancho que comenzaba a no sentir los golpes. Tenéis que perdonar no siete veces, sino setenta veces siete. Sus ojos borrosos no podían ver la sangre que resbalaba ya de sus pies al suelo. Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados. Un nuevo golpe venía a borrar las fronteras del consuelo. Cedieron sus rodillas y su cabeza se golpeó con la columna al caer. Hicieron girar su cuerpo para que siguiera ofreciendo la espalda a los látigos. Ahora ya no medían los golpes y éstos herían sus piernas, sus muslos, su cintura. Ésta es mi sangre que se entrega por vosotros.

JOSÉ LUIS MARTÍN DESCALZO
Vida y misterio de Jesús de Nazaret

miércoles, 17 de marzo de 2010

Calle arriba desde mi casa

Hoy día, con el Google Earth, puedes visitar prácticamente cualquier rincón del mundo sin moverte de casa, con sólo un clic del ratón y siempre, claro está, que la nubes no te impidan la visión. Pero, como hoy las ciencias adelantan que es una barbaridad, sobre todo la cosa esta del Internet, resulta que ahora no sólo puedes ver cualquier ciudad del planeta, sino plantarte en sus mismas calles y contemplar, con un poco de suerte, la fachada de tu casa o el rostro del vecino, que en ese momento salía de la suya, o, quién sabe, cruzarte con ese amigo al que no ves desde hace años. Es lo que pueden comprobar con el nuevo invento que les presento, gentileza de mi amiga Henar, aunque algunos quizá ya lo conozcan. Viendo las posibilidades del juguete, estoy pensando en recorrerme cualquier ciudad de interés turístico sin moverme de este sillón, para admirar sus monumentos y demás fisonomías de interés, libre, por supuesto, de tráficos y aglomeraciones. Ya tengo planeada una escapada a Roma y otra a Londres.

Para llegar a un sitio, saque primero los billetes en la taquilla de abajo y aparecerá una página (que puede guardar si quiere en “Favoritos” de su ordenador) en la que deberá teclear la dirección y la ciudad elegida en la casilla “Address” (o “Dirección”, si ya se lo ha traducido el Google). Pinche luego en “Go”, y ya está, como por arte de magia se sitúa en el sitio elegido. Con la ruedecita situada en la parte superior izquierda puede girar la imagen hacia donde quiera –también puede hacerlo con el ratón-, a la derecha, a la izquierda, hacia arriba o hacia abajo, y pulsando en la flechas de la línea blanca puede desplazarse por las calles –también, haciendo doble clic en los círculos que aparecen al mover el puntero del ratón. Además, se puede hacer zoom sobre una determinada zona haciendo doble clic sobre los cuadrados que van apareciendo al mover el puntero y aumentar o disminuir la imagen pulsando en los signos + o -. Otra opción para desplazarse por la ciudad o el pueblo elegidos es mover el monigote que aparece en el mapa de la derecha, arrastrándolo con el ratón y procurando, eso sí, no salirse de las calles marcadas con línea azul, ya que el resto parecen vedadas al visitante. Buen viaje y que disfrute del recorrido.


TAQUILLA

viernes, 12 de marzo de 2010

Aborto libre y progresismo


Esta mañana ha fallecido, en su casa de Valladolid, el escritor y académico Miguel Delibes. Desde “La sombra del ciprés es alargada” (1948), obra que supuso su estreno en las letras y con la cual consiguió el Premio Nadal, hasta “La tierra herida” (2005), escrita con su hijo Miguel, más de cincuenta títulos jalonan la trayectoria de un escritor considerado como uno de los grandes de la literatura española. “Dentro de doscientos años los niños estudiarán la obra de Delibes junto a la de los grandes de la Literatura española: Cervantes, San Juan de la Cruz, Quevedo, Lope de Vega, Góngora, Calderón, Pérez Galdós, Bécquer, Ortega y Gasset, Juan Ramón Jiménez, Valle-Inclán, Aleixandre, Buero Vallejo, Unamuno, Federico García Lorca.”, ha escrito de él el también académico Luis María Anson. Pero no es la intención de este blog escribir una semblanza sobre su vida y su obra; ya se encargará de valorar su figura, desde hoy y en los próximos días, gente más preparada que quien esto escribe. Sí quiero traer, como homenaje, un artículo suyo publicado por primera vez en ABC en 1986 y vuelto a publicar, en este periódico y en otros medios, en sucesivas ocasiones, dado que no parece pasar nunca de actualidad. Se titula “Aborto libre y progresismo”, y es una aproximación al tema del aborto que, como verán, podría haberse escrito hoy mismo y que viene a demostrar que se puede estar a favor de la vida con independencia de la ideología que cada uno profese.



ABORTO LIBRE Y PROGRESISMO

En estos días en que tan frecuentes son las manifestaciones en favor del aborto libre, me ha llamado la atención un grito que, como una exigencia natural, coreaban las manifestantes: “Nosotras parimos, nosotras decidimos”. En principio, la reclamación parece incontestable y así lo sería si lo parido fuese algo inanimado, algo que el día de mañana no pudiese, a su vez, objetar dicha exigencia, esto es, parte interesada, hoy muda, de tan importante decisión. La defensa de la vida suele basarse en todas partes en razones éticas, generalmente de moral religiosa, y lo que se discute en principio es si el feto es o no es un ser portador de derechos y deberes desde el instante de la concepción. Yo creo que esto puede llevarnos a argumentaciones bizantinas a favor y en contra, pero una cosa está clara: el óvulo fecundado es algo vivo, un proyecto de ser, con un código genético propio que con toda probabilidad llegará a serlo del todo si los que ya disponemos de razón no truncamos artificialmente el proceso de viabilidad. De aquí se deduce que el aborto no es matar (parece muy fuerte eso de calificar al abortista de asesino), sino interrumpir vida; no es lo mismo suprimir a una persona hecha y derecha que impedir que un embrión consume su desarrollo por las razones que sea. Lo importante, en este dilema, es que el feto aún carece de voz, pero, como proyecto de persona que es, parece natural que alguien tome su defensa, puesto que es la parte débil del litigio.

La socióloga americana Priscilla Conn, en un interesante ensayo, considera el aborto como un conflicto entre dos valores: santidad y libertad, pero tal vez no sea éste el punto de partida adecuado para plantear el problema. El término santidad parece incluir un componente religioso en la cuestión, pero desde el momento en que no se legisla únicamente para creyentes, convendría buscar otros argumentos ajenos a la noción de pecado. En lo concerniente a la libertad habrá que preguntarse en qué momento hay que reconocer al feto tal derecho y resolver entonces en nombre de qué libertad se le puede negar a un embrión la libertad de nacer. Las partidarias del aborto sin limitaciones piden en todo el mundo libertad para su cuerpo. Eso está muy bien y es de razón siempre que en su uso no haya perjuicio de tercero. Esa misma libertad es la que podría exigir el embrión si dispusiera de voz, aunque en un plano más modesto: la libertad de tener un cuerpo para poder disponer mañana de él con la misma libertad que hoy reclaman sus presuntas y reacias madres. Seguramente el derecho a tener un cuerpo debería ser el que encabezara el más elemental código de derechos humanos, en el que también se incluiría el derecho a disponer de él, pero, naturalmente, subordinándole al otro.

Y el caso es que el abortismo ha venido a incluirse entre los postulados de la moderna “progresía”. En nuestro tiempo es casi inconcebible un progresista antiabortista. Para éstos, todo aquel que se opone al aborto libre es un retrógrado, posición que, como suele decirse, deja a mucha gente, socialmente avanzada, con el culo al aire. Antaño, el progresismo respondía a un esquema muy simple: apoyar al débil, pacifismo y no violencia. Años después, el progresista añadió a este credo la defensa de la Naturaleza. Para el progresista, el débil era el obrero frente al patrono, el niño frente al adulto, el negro frente al blanco. Había que tomar partido por ellos. Para el progresista eran recusables la guerra, la energía nuclear, la pena de muerte, cualquier forma de violencia. En consecuencia, había que oponerse a la carrera de armamentos, a la bomba atómica y al patíbulo. El ideario progresista estaba claro y resultaba bastante sugestivo seguirlo. La vida era lo primero, lo que procedía era procurar mejorar su calidad para los desheredados e indefensos. Había, pues, tarea por delante. Pero surgió el problema del aborto, del aborto en cadena, libre, y con él la polémica sobre si el feto era o no persona, y, ante él, el progresismo vaciló. El embrión era vida, sí, pero no persona, mientras que la presunta madre lo era ya y con capacidad de decisión. No se pensó que la vida del feto estaba más desprotegida que la del obrero o la del negro, quizá porque el embrión carecía de voz y voto, y políticamente era irrelevante. Entonces se empezó a ceder en unos principios que parecían inmutables: la protección del débil y la no violencia. Contra el embrión, una vida desamparada e inerme, podía atentarse impunemente. Nada importaba su debilidad si su eliminación se efectuaba mediante una violencia indolora, científica y esterilizada. Los demás fetos callarían, no podían hacer manifestaciones callejeras, no podían protestar, eran aún más débiles que los más débiles cuyos derechos protegía el progresismo; nadie podía recurrir. Y ante un fenómeno semejante, algunos progresistas se dijeron: esto va contra mi ideología. Si el progresismo no es defender la vida, la más pequeña y menesterosa, contra la agresión social, y precisamente en la era de los anticonceptivos, ¿qué pinto yo aquí? Porque para estos progresistas que aún defienden a los indefensos y rechazan cualquier forma de violencia, esto es, siguen acatando los viejos principios, la náusea se produce igualmente ante una explosión atómica, una cámara de gas o un quirófano esterilizado.

Miguel Delibes

lunes, 8 de marzo de 2010

Mientras dormías

Te conocí mientras dormías. Bueno, en realidad no eras tú quien dormía, sino el tipo aquel al que salvaste de ser arrollado por el tren y del que estabas enamorada en secreto después de mucho frecuentar la ventanilla en la que le despachabas los billetes. Antes ya habías demostrado tus dotes como piloto en “Speed”, en compañía de Keanu Reeves, y de policía en “Demolition man”, junto al musculitos de Sylvester Stallone. Pero fue en esta película, como te decía, “Mientras dormías”, cuando te vi por primera vez. Yo entonces también me enamoré de ti en silencio, cuando te veía abrazando a Bill Pullman en los carteles de la película y me imaginaba que era a mí a quien abrazabas.

Este caballero no tuvo oportunidad de salvarte del tren, ni de repartir mandobles para rescatarte de algún villano que te hubiera raptado, pero aun así siguió pensando en ti, por lo menos tantas veces como te veía en alguna película o en las ocasiones en que volvía a encontrarse con esos brazos que se abrazaban a un cuello que seguía imaginando suyo.

Después de esta película, no puede decirse que tu trayectoria como actriz, salvo algunos títulos, haya sido muy afortunada, con comedias románticas –un género en el que compartes reinado junto a Julia Roberts y Meg Ryan- que se salvaban sólo por tu presencia, o películas de acción como “La red”, además de alguna incursión en el drama, como en la extraordinaria “Crash”. Hoy me entero de que, precisamente en otro papel dramático, te han concedido el Oscar a la mejor actriz, por una película, “The blind side”, aún no estrenada en España y en la que interpretas a una mujer de familia blanca rica que adopta a un adolescente afroamericano sin recursos y le ayuda a salir adelante en la vida a través del fútbol americano. Enhorabuena, pues, Sandra, por esta estatuilla y que esa sonrisa tuya siempre a punto nos siga transportando a ese cielo posible que se abre con las ventanas del celuloide.



domingo, 28 de febrero de 2010

Más allá del papel


Hace poco hablando de ti, y de pronto te encuentro en el periódico, escribiendo distancias y fieros azules, unas pocas tristezas más en las noticias del día. Acaso el fotógrafo sepa qué se esconde en esos ojos, si cuando no miran aún permanecen en su sílaba altiva o si, por el contrario, son capaces de derramar un poco de agua. Jamás conocerás este latido, estos pájaros que intentan volar más allá del papel y de las horas, y si acaso lo conocieras, sólo podría significar mi muerte o mi delirio. Quizá es preferible que seas sólo eso, una página, noticia sólo de lo azul y de su piel devastadora, y yo sólo un lector de cielos, de los prodigios que a veces saltan de su azul distante y puro.

Feliz cumpleaños, Natalia.

lunes, 22 de febrero de 2010

Noticias de febrero


“En febrero, busca la sombra el perro”, dice el refrán. “Pero a últimos, que no a primeros”, añadía siempre el abuelo. Pues este año, al paso que llevamos, me parece que vamos a tener que esperar a marzo y los albores de la primavera para buscar esa sombra que ahora parece perpetua en este cielo de cuaresma. No suele fallar “febrerillo el loco” en las previsiones, y a días de calor siempre han sucedido días de frío intenso. Sin embargo, este año la lluvia, el frío y la nieve, como casi todo el invierno, parecen empeñados en que permanezcamos encerrados entre cuatro paredes y una angustia.

Dicen que en algunas partes ya han florecido los almendros; pero como no sea en los ojos de Natalia Vodianova, no comprendo qué lugar mágico puede ser ése. Y no es que me disguste este rumor de la lluvia, estas sílabas que a veces conforman fantasmas del pasado o lugares distantes, pero ya empiezo a echar de menos los anillos del sol en la ventana.

Duerme el Rufo su blanca siesta y en el jardín, hace ya varios días, ha aparecido el primer gato –gris con manchas negras, como estos días- después de que en noviembre se muriera el Beckham. No sabemos de dónde viene, ni si se quedará, pero ya parece saber que en este sitio no le va a faltar la comida, aunque todavía huye como un poseso cuando nota alguna presencia humana. Aún no tiene nombre, así que alguno habrá que buscarle si por fin toma posesión de esta plaza.

La ausencia de nombre, el miedo a que se disuelva, es algo que parece unido al cielo gris de estos días, a la ausencia de una lengua de sol que te bautice al fin de alegría. En este cielo cegado, en unas palabras confundidas por quién sabe qué viento oscuro, siento que el nombre, al menos en unos labios, se me escapa sin remedio, que los momentos pasados a punto están de ser ceniza. El extravío de unos ojos donde siempre te encontrabas. Y mira que podrías encender silencios con ellos...

martes, 16 de febrero de 2010

Nueva palabra para el DRAE

La Real Academia Española, en sesión plenaria, ha decidido crear la acepción * zp *, en homenaje al gran intelectual que ocupa la Presidencia del Gobierno, Sr. Rodríguez Zapatero.

En el acto, el secretario de la Academia leerá la acepción de *zp*, que será incluida en la próxima edición del Diccionario de la Real Academia Española y que es la siguiente:

* ZP o ZETAPÉ*. (del latín, zopencus permanentis).

Dícese del que por fuego o explosión se ve aupado a un cargo público sin ser capaz de desempeñarlo.

U.t.c. insulto, equivalente a tonto: ‘no seas zp’ por ‘no seas tonto’

Individuo que puede hablar de cuestiones complejas, que desconoce, sin decir absolutamente nada, pero con mucho talante.

Hombre al que le sientan mal los trajes, le quedan las mangas raras, se le meten los pantalones por los calcetines y carece del más mínimo estilo o donaire en el vestir.

Sujeto al que le queda grande un cargo.

El que se mete en líos y no sabe cómo salir de ellos, metiendo en líos a los demás, innecesariamente.

Persona que a la muerte de soldados en zona de guerra le llama accidente si los envía él, y asesinato si los envía cualquier otro.

Que siente placer en molestar y disgustar a otras naciones. Que se regodea en la mala educación con los mandatarios de un país, insulta a su pueblo no levantándose al paso de su bandera y, simultáneamente, quiere ser recibido por su presidente.

Persona de la que se ríe medio país, mientras el otro medio se echa las manos a la cabeza con las tonterías que hace.

10º Persona poco instruida en la Historia de España, que se permite el lujo de jugar a desmembrarla y que dice aceptar cualquier barbaridad que le puedan enviar desde un parlamento regional.

11º El que negocia con terroristas y pone en la calle asesinos. El que, incumpliendo la Ley, permite la presencia de terroristas en las instituciones, facilitándoles subvenciones y financiando sus actividades con el dinero de todos.

12º Sujeto que tiene un parecido impresionante con el humorista británico conocido como Mr. Bean, que se caracteriza por interpretar papeles de imbécil.

13º Dícese del que hundiendo un país aparenta salvarlo.

14º Persona obsesionada con la guerra civil española.

15º Inventor de la Alianza de Civilizaciones, interesante iniciativa que contempla llevar velo, cortarle una mano al ladrón, fomentar la guerra santa, impedir la libertad de culto, que la mujer vaya dos pasos detrás del varón, que no pueda decidir sobre su futuro o con quién contrae matrimonio y otras prácticas muy civilizadas.

16º Tonto del culo.

sábado, 6 de febrero de 2010

Yesterday


Mi amiga Rosana, la que hace tiempo me "traspaso" El Kiosco de prensa, me regala una auténtica joya (ella sí que es una joya También, una aguamarina, creo). Una joya que me retrotrae A UN patio de colegio ya unos recreos donde no dejaban de sonar por los altavoces las canciones de un grupo Qué hacía Pocos años se había disuelto: Los Beatles. A uno de nuestros mandos, como llamábamos A LOS Esteban que un cargamento nuestro, parece que le encantaba el cuarteto de Liverpool, y que aprovechaba También Estaba al cuidado de la megafonía para escuchar Una y otra vez sus canciones. Una letra y una música (más bien la música, entonces Porque la letra Difícilmente podíamos entenderla) que Quedaron para siempre grabadas en mi memoria y que casi siempre me Llevan ese patio ya una recién estrenada una pubertad Cuando las escucho. Parece que fue ayer, pero ya han pasado más de treinta años. Aquí están todas las canciones de los Beatles con su letra (bueno, no sé si todas, alguna y no venta), por si Algún nostálgico quiere volver a escucharlas y Quizá saber qué es lo que decían SEE letras que entonces sólo acertaba un tararear.


TODAS LAS CANCIONES DE LOS BEATLES CON LETRAS Y VIDEOS

Un Día en la Vida, A Hard Day's, Un sabor a miel, Across The Universe, Act Naturally, Todo lo que tienes que hacer, All My Loving, All Together Now, All You Need Is Love, And I Love Her, And your bird can sing, Anna (Go To Him), Another Girl, Any Time At All, Ask Me Why, Baby It's You, Baby eres un hombre rico, Bad Boy, Porque, Estar en beneficio de Mr. Kite!, Cumpleaños, Blackbird, Blue Jay Way, Boys, Can't Buy Me Love, Carry That Weight, Cadenas, Come Together, Cry Baby Cry, Day Tripper, Dear Prudence, Devil In Her Heart, Dig A Pony, Dig It, Dizzy Miss Lizzie, Do You Wanna Know a Secret, Doctor Robert, Don't Bother Me, Don't Let Me Down, Don't Pass Me By, Drive My Car, Eight Days a Week, Eleanor Rigby, Every Little Thing, Everybody's Got Something to Hide excepto yo y mi mono, Everybody's Trying To Be My Baby, Fixing a Hole, Flying (instrumental), For No One, For You Blue, Free As A Bird, From Me To You, Get Back, Getting Better, Niña, Glass Onion, Golden Slumbers, Good Day Sunshine, Good Morning, Good Morning,, Good Night,, Got To Get You Into My Life, Happiness is a Warm Gun, Hello, Goodbye, Ayuda, Helter Skelter, Su Majestad, Here Comes The Sun, Here, There And Everywhere, Hey Bulldog, Hey Jude, Hold Me Tight, Honey Don't, Honey Pie, I Am The Walrus, I Call Your Name, I Don't Want a arruinar la fiesta, I Feel Fine, I Me Mine, I Need You, I Saw Her Standing There, I Should Have Known Better, I Wanna Be Your Man, I Want To Hold Your Hand, I Want To Tell You, I Want You (She's So Heavy),, I Will, I'll Be Back, I Cry lo contrario, I'll Follow The Sun, I'll Get You, Soy un perdedor, I'm Down, Estoy feliz de bailar con usted, I'm Looking Through You, I'm Only Sleeping, Estoy tan cansado, I've Got A Feeling, I've Just Seen a Face, If I Fell, If I Needed Someone, In My Life, It Won't Be Long, It's All Too Much, It's Only Love, Julia, Kansas City / Hey, Hey, Hey, Hey, Komm Gib Mir Deine Hand, Lady Madonna, Let it Be, Little Child, Long Tall Sally, Long, Long, Long, Love Me Do, Love You To, Lovely Rita, Lucy in the sky with diamonds, Maggie Mae, Magical Mystery Tour, Martha My Dear, Matchbox, Maxwell's Silver Hammer, Mean Mr. Mustard, Michelle, Misery, Money (That's What I Want), Mother Nature's Son, Mr. Moonlight, No Reply, Norwegian Wood, Not a Second Time, Nowhere Man, Ob-La-Di, Ob-La-Da, Octopus's Garden, ¡Oh! Cariño, Old Brown Shoe, One After 909, Sólo una canción del Norte, P.S. Te Quiero, Paperback Writer, Penny Lane, Piggies, Please Mister Postman, Please Please Me, Polythene Pam, Lluvia, Real Love, Revolution 1, Revolution 9, Rock and Roll Music, Rocky Raccoon, Roll Over Beethoven, Run For Your Life, Savoy Truffle, Sexy Sadie, Sargento. Pepper's Lonely Hearts Club Band, Sargento. Pepper's Lonely Hearts Club Band (Reprise), She Came In Through The Bathroom Window, She Loves You, She Said, She Said, She's A Woman, She's Leaving Home, Sie liebt Dich, Slow Down, Algo, Strawberry Fields Forever, Sun King, Taxman, Tell Me What You See, Tell Me Why, Thank You Girl, La balada de John y Yoko, The Continuing Story of Bungalow Bill, The End, The Fool On The Hill, The Inner Light, El Long and Winding Road, La noche antes de, La Palabra, There's A Place, Things We Said Today, Think For Yourself, This Boy, Ticket to Ride, Till There Was You, Tomorrow Never Knows, Twist and Shout, Dos de nosotros, Esperar, We Can Work It Out, What Goes On, Qué está haciendo usted, When I Get Home, When I'm Sixty-Four, While My Guitar Gently Weeps, ¿Por qué no lo hacemos en la carretera, Wild Honey Pie, With A Little Help From My Friends, Within You Without You, Palabras de Amor, Yellow Submarine, Yer Blues, Yes It Is, Ayer, You Can't Do That, You Know My ame, You Like Me Too Much, You Never Give Me Your Money, You Really Got A Hold On Me, You Won't See Me, Usted va a perder That Girl, Usted va a perder That Girl, You've Got to Hide Your Love Away, Your Mother Should Know.



El video de The Beatles Discos:

Please Please Me, With The Beatles, A Hard Day's, Beatles For Sale, Ayuda!, Rubber Soul, Revolver, Sargento. Pepper's Lonely Hearts Club Band, Magical Mystery Tour, The Beatles - White Album, Yellow Submarine, Abbey Road, Let It Be, Past Masters Volume 1, Past Masters Volume 2 .

jueves, 28 de enero de 2010

Referéndum por la vida

Desde hace unas semanas, promovida por la Confederación Católica de Padres de Alumnos (CONCAPA), se encuentra en marcha una iniciativa, a la que se han sumado algunas organizaciones pro-vida más, para pedir un referéndum sobre la nueva ley del aborto. No dudo en ningún momento de las buenas intenciones de estos grupos, pero no creo que sea una buena idea. Hace unos meses, escribía un post sobre este asunto, “Las leyes no escritas”, en el que a la vez comentaba un excelente artículo de Francisco Rodríguez Adrados sobre el mismo tema, en el que se refería a las leyes no escritas de los dioses, dentro de las cuales se encontraría el derecho a la vida de todo ser humano.

Si entonces decía que una ley sobre el aborto no puede estar sometida al consenso de los distintos grupos políticos, ya que el derecho a la vida se encontraría por encima de cualquier normativa humana, hoy tengo que volver a decir lo mismo ante la propuesta de este referéndum. Así es, el primero de todos los derechos, el derecho a nacer, no puede depender de lo que diga una mayoría en un momento determinado. La dignidad de la vida humana es algo superior a cualquier sistema político, por muy legitimado que se pueda encontrar éste en una época de la historia, como es en nuestro tiempo la democracia. A nadie se le ocurre someter a votación la Ley de la Gravitación Universal de Newton, por ejemplo, o que la Tierra gira alrededor del Sol. Pues lo mismo sucede con la vida humana.

No estaría en todo caso claro, además, el resultado de este referéndum que, de resultar negativo para la postura pro-vida, no haría otra cosa que reforzar el proyecto de ley del Gobierno. Por otra parte, ¿en manos de quién vamos a poner la vida del no nacido? Ahora mismo no hay en el Congreso ningún partido que defienda con rotundidad la vida, pues el Partido Popular lo único que hace es oponerse al nuevo proyecto, pero se encuentra de acuerdo con la legislación vigente, es decir, con los más de cien mil abortos que se producen cada año en España; ha pasado de ser un partido que se opuso a la Ley del año 85 a apostar sin ningún pudor por el aborto. Como para fiarse de nuestros representantes.

jueves, 21 de enero de 2010

Pozo de la nieve


Estos días pasados, en medio de ese temporal de nieve y de frío que ha arreciado en toda España de una manera que nunca he conocido, me ha dado por pensar en la excelente idea que sería conservar un poco de ese frío para la canícula, para esos días de julio y de agosto en que miras suplicante al cielo por un poco de agua. Y he recordado que en el pueblo existe una calle, Pozo de la Nieve, que remite a una actividad que, como es lógico, alguien la había pensado antes que yo.

Los pozos de las nieves, o neveros artificiales, son pozos excavados en la tierra con muros de contención, de gran variedad de tamaños, incluso con techo, que disponen de aberturas para la introducción de la nieve y la posterior extracción del hielo. Se encuentran distribuidos por toda la geografía española para una actividad que data del tiempo de los romanos y que tuvo su máximo desarrollo entre los siglos XVI y XIX, decayendo su uso a mediados del siglo pasado con la aparición de los primeros frigoríficos.

Hasta ese momento, la conservación de los alimentos se realizaba por medio de la salmuera, los adobos, las conservas o, como en el tema que nos ocupa, el aprovechamiento de la nieve. Este último sistema fue el origen de un trabajo y una profesión que pervivió aproximadamente hasta 1931. Además, el frío se utilizaba también con fines terapéuticos. Ya en la antigüedad clásica los médicos prescribían su utilización con fines medicinales, un uso que se recuperó con fuerza durante el Renacimiento. El hielo servía como remedio para rebajar la temperatura en los procesos febriles, en los producidos por la epidemia del cólera, como calmante en casos de congestiones cerebrales, en particular en la meningitis, también para detener hemorragias y como antiinflamatorio en traumatismos, esguinces o fracturas.

Los trabajos en los neveros comenzaban en primavera después de las últimas nevadas. Cortaban la nieve con palas y la llevaban a los pozos de nieve, donde la prensaban hasta convertirla en hielo para que se conservara más tiempo y ocupara menos espacio. Después se cubría con tierra, hojas, paja o ramas –que servían de aislante- formando capas de un grosor homogéneo. El dicho “limpio de polvo y paja” viene precisamente de esta actividad de los neveros, de una cédula real que exigía que el hielo debía llegar así al consumidor. Ya en verano, se cortaban bloques de hielo que eran transportados a lomos de bestias de carga durante la noche, para evitar que se derritieran, hasta los puertos y núcleos urbanos más cercanos, donde eran comercializados. La dureza del trabajo debía de ser impresionante. Los trabajadores de la nieve no disponían de abrigos y calzado moderno, y trabajaban en condiciones de frío intenso acumulando nieve en los pozos.

Nuestros abuelos seguro que recuerdan cuando tenían que ir a comprar hielo para alimentar las primeras neveras domésticas o para otro uso. Luego, la aparición de los frigoríficos y la producción de hielo de forma industrial hizo que esta actividad de la nieve quedara anticuada y los pozos fueran abandonados. Hoy resisten algunos de ellos en mejor o peor estado o envueltos en el recuerdo de una calle con su nombre y en unos copos de nieve que me han llevado hasta otro tiempo.